Acuerdo para iluminar las ruinas de los molinos históricos de viento de Campo de Criptana

Acuerdo para iluminar las ruinas de los molinos históricos de viento de Campo de Criptana

  • La Fundación Iberdrola España ha invertido 18.587 euros para la iluminación ornamental de las ruinas de los molinos históricos y la cueva silo de Campo de Criptana
  • Gracias a esta iluminación se pondrá en valor los restos tras su limpieza y consolidación

Iberdrola, a través de su fundación, ha suscrito hoy un acuerdo valorado en 18.587 euros para desarrollar un proyecto iluminación de las ruinas de los molinos históricos y la cueva silo de Campo de Criptana, Ciudad Real.

El acuerdo ha sido suscrito esta mañana en este municipio castellanomanchego por el alcalde de Campo de Criptana, D. Santiago Lázaro y el director de la Fundación Iberdrola España, Ramón Castresana, en presencia del delegado de Iberdrola en Castilla-La Mancha, D. Javier Nicolás y el presidente de la Fundación Iberdrola España, D. Fernando García Sánchez.

El proyecto constará de la instalación de proyectores para los molinos y la cueva silo del molino Castaño, utilizando un sistema de control remoto sobre Bluetooth Low Energy (BLE), el estándar de comunicación inalámbrica más avanzado, que permitirá aprovechar todo el potencial de la instalación de la iluminación.

Esta nueva iniciativa, que contará con una inversión de 18.587 euros, es una muestra más del compromiso de Iberdrola con Castilla-La Mancha y de su propósito permanente de promover el valor social de la cultura y conservación del patrimonio histórico-artístico de la región.

Los molinos y la cueva silo de Campo de Criptana

El molino de Campo de Criptana se conoce como molino de torre. El tambor se construye a base de mampostería de piedra, reduciendo su sección en altura con dos niveles. Exteriormente se enfosca con mortero de cal y arena encalándose para protegerlo. La planta circular, con un grueso muro, soporta una cubierta de estructura de madera a veces cubierta de cinc y en los más antiguos de madera, de forma que se pueda orientar al viento.

La cueva-silo sigue las directrices de la construcción del Molino, gruesos muros rectilíneos de mampostería laterales, adosados al terreno circundante y una bóveda de mampostería circular apoyada en los muros laterales. El cerramiento frontal se realiza mediante un muro rectangular de espesor constante donde se ejecuta el hueco de acceso al silo, mediante una puerta de madera de una hoja, suficiente para el acceso para ensilar de manera manual los sacos que contenían el grano a procesar y también permitían el acceso de pequeñas caballerías (mulas o asnos).

El interior estaba enlucido con una gruesa capa de yeso negro, que permitía una vez limpio, el tratamiento con cal viva (encalar) tanto al interior como a la fachada del silo, el interior del Molino y su fachada circular. De todos es conocido que este tratamiento al exterior protegía los muros de las inclemencias meteorológicas (agua, nieve, viento…) y era el método más barato y eficiente para desinfectar. Eliminando sobre todo insectos y sus huevos que pudieran alimentarse del grano una vez ensilado en la campaña siguiente.

Iberdrola, con la promoción del arte y la cultura

Iberdrola, desde su creación, ha estado comprometida con el desarrollo energético, cultural y social de las comunidades en las que está presente. En este sentido, la Fundación Iberdrola España representa un paso más en dicho compromiso, mediante el impulso de iniciativas que contribuyen a mejorar la calidad de vida de las personas. Una de las principales áreas de actuación de la Fundación se centra en el cuidado, mantenimiento y promoción del arte y la cultura.

Desde el año 2011, ha destinado más de tres millones de euros. Esta inversión ha supuesto la mejora de más de 40 monumentos en España. Destacan los trabajos en el histórico Puente Romano de Alcántara, en Cáceres; la fachada del Tribunal Supremo, en Madrid; la Catedral de Sigüenza, o el interior de la Catedral de Santiago de Compostela.